El doctor Pablo Del Cid presentará una conferencia abierta al público denominada "Happy Trainer: Entrenate para ser feliz".
Tal vez no todos lo sepan y está bien que así sea, pues el Happy Trainer, o entrenador de la felicidad, afirma que éste es el secreto mejor guardado. La ciencia descubrió que la felicidad, al igual que sucede con un músculo, se puede ejercitar y con una serie de simples actividades, ser feliz, no es imposible. El doctor Pablo Del Cid, nacido en San Juan y radicado en Mar del Plata hace ya varios años, es un conocido médico clínico que tras una profunda y extensa búsqueda personal y profesional, se especializó en la práctica de mindfulness, transformándose en uno de los referentes en el tema en la ciudad. Después de haber realizado decena de cursos en el ámbito privado como un coach de la felicidad para empresas y grandes estructuras de trabajo, presentará el viernes 13 de octubre a las 21 en el Teatro Roxy (San Luis 1750), una conferencia abierta al público en general llamada “Happy Trainer: Entrenate para ser feliz”.
“La clave es tener el coraje y el valor de tomar la decisión firme y con intención para aprender cómo funciona nuestro complejo ‘mente, cerebro y corazón’, y así, hacerlos trabajar de la manera adecuada para los fines que buscamos”, afirma Del Cid a través de los videos del Happy Trainer, que rápidamente captaron la atención de la gente a través de los micros en televisión y videos en redes sociales.
“Ser feliz es simple, pero por alguna razón en los tiempos que corren, se ha transformado en algo difícil de lograr. Sin embargo, no es imposible alcanzar ese estado de plenitud y por eso en el teatro voy a compartir con el público uno de los secretos mejor guardados, y es que la felicidad se entrena”, afirma el Happy Trainer quien a través de sus redes sociales, difunde unos videos de menos de un minuto en el que a diario comparte varios de estos tips.
Según se desprende de los consejos del Happy Trainer, “sólo dos cosas dañan al cerebro: el estrés y no usarlo. Todos tenemos en la cabeza una máquina con capacidades extraordinarias esperando que le demos buen uso y muchas veces no sabemos cómo hacerlo y aunque resulte una obviedad, lo cierto es que nadie puede hacernos feliz, sino que es una decisión propia tanto como una tarea personal”, agrega.
“Es común que nos aferremos a las relaciones, los hijos, los padres, el trabajo, el dinero o el éxito, depositando allí nuestra felicidad, siendo que a pesar de todos los avances, no hemos podido crecer como sociedad hacia un estado de felicidad duradero, independiente de los sucesos o fenómenos que nos ocurren”, señala Del Cid, quien lleva años formándose en distintas disciplinas, principalmente el mindfulness, una forma de meditación que se basa en la conciencia plena sobre los pensamientos del momento y es furor en el mundo.